Esta fecha conmemorativa fue establecida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1977, en homenaje a las 129 obreras textiles de la fábrica Cotton de Nueva York, Estados Unidos, que fallecieron en un incendio mientras realizaban una huelga por mejores condiciones laborales, el 8 de marzo de 1857, dejando un legado en el trabajo por los derechos de las mujeres y su participación en los distintos ámbitos de la sociedad.
Esta fecha tan especial se trata de una reivindicación de los derechos de las mujeres. De todas las mujeres.
El objetivo es sensibilizar a la sociedad y potenciar la igualdad real de género. Así, se reclama la reducción de las desigualdades de género.
El 8M también se recuerda que las violencias contras las mujeres, en especial la violencia de género y la violencia sexual, son la expresión más amarga de las sociedades machistas, con convicciones profundamente patriarcales.
La manifestación del 8M es una jornada de unión de las mujeres de todo el mundo, sin importar su procedencia, su raza, su profesión ni su nivel de ingresos. El 8M es una jornada de celebración y también de lucha.
Historia del día de la mujer
El 8M como día internacional de la mujer fue adoptado por la Asamblea General de la ONU en 1977, aunque dos años antes ya lo había empezado a conmemorar. Su origen está en las manifestaciones de las mujeres que, especialmente en Europa, reclamaban a comienzos del siglo XX el derecho al voto, mejores condiciones de trabajo y la igualdad entre mujeres y hombres.
¿Por qué se celebra en 8 de marzo?
Según argumenta Naciones Unidad, quien constituyó el día internacional hace 47 años, celebrar el 8 de marzo el día de la mujer está estrechamente vinculado a los movimientos feministas durante la Revolución Rusa de 1917.
Fue un 8 de marzo de 1917 (un 23 de febrero, según el calendario juliano que se utilizaba en Rusia), cuando las mujeres rusas se declararon en huelga, pidiendo Pan y paz. Cuatro días después, el zar se vio obligado a abdicar y el gobierno provisional concedió a las mujeres el derecho de voto.
Desde los primeros años del siglo XX, mujeres de EEUU y Europa protagonizaron protestas, manifestaciones y encuentros que fueron sembrando la semilla del 8M: mujeres de todo el mundo unidas, reclamando su igualdad frente a los hombres.